El presidente de Madagascar, Andry Rajoelina, ha pedido este miércoles un año de margen para cambiar la situación en el país insular, que ha registrado varias semanas de manifestaciones en las que se han notificado más de una veintena de muertos y que han llegado a provocar la caída del gobierno por la represión policial.
Durante las violentas protestas, que se han saldado con 22 muertos y cientos de heridos a causa de la represión policial, se han producido bloqueos de carreteras, quema de mobiliario urbano o saqueos perpetrados por individuos que han aprovechado el caos generalizado en el país.